Desde hace tres años, Gerardo Leyva Gómez y sus colaboradores de la Facultad de Química de la UNAM desarrollan unas diminutas esferas (de 100 a 200 nanómetors de diámetro) que navegarán por el torrente sanguíneo hasta el cerebro para combarir padecimientos neurológicos como la enfermedad de Alzheimer, el mal de Parkinson, la epilepsia y la ataxia espinocerebelosa tipo 7, entre otros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario